ACS se desinfla en Bolsa tras llegar a subir un 2% mientras que Atlantia se dispara un 7%
Aunque en la primera parte de la sesión, las acciones de ACS han llegado a subir más de un 2% en Bolsa, la constructora presidida por Florentino Pérez cotiza casi sin cambios. La compañía baraja hacerse con Atlantia, valorada en más de 15.000 millones de euros, aunque la operación alcanzaría los 45.000, ya que además de su capitalización bursátil, deberá asumir la deuda de la compañía italiana, que asciende a 30.000 millones. Como alternativa, Blackstone estudia también lanzar una oferta por la empresa de infraestructuras, que sube cerca de un 7% en el parqué milanés.
Tras marcar máximos por encima de los 24 euros, los títulos de ACS suben un 0,17%. Para llevar a cabo la compra, la constructora presidida por Florentino Pérez cuenta con una alianza exclusiva con los fondos GIP y Brookfield.
ACS y Atlantia, compañía controlada al 33,1% por la familia Benetton, ya son socios en Abertis, empresa española concesionaria de autopistas en la que la primera cuenta con el 50% menos una acción y la segunda con el otro 50% más una acción.
Los Benetton incrementaron el control sobre Atlantia recientemente, después de la venta por 8.000 millones de euros de la unidad de peaje de autopistas de la compañía en Italia, Autostrade, el año pasado. Eso significa que cualquier adquisición sería difícil sin contar con el acuerdo de la familia italiana. Y ahí es donde entra Blackstone. Según adelantó Bloomberg, el gigante estadounidense de capital privado está en conversaciones para asociarse con el clan transalpino.
El Gobierno italiano, principal escollo
Los analistas de Renta 4 creen que «a priori», la operación parece complicada, tanto por el tamaño de Atlantia con respecto a ACS -ya que la primera cuenta ahora con una capitalización de 15.600 millones de euros, frente a los 6.500 millones de la segunda-, como por la posibilidad de que el Estado italiano pueda poner trabas a la misma. Este segundo factor, dicen, «es el mayor escollo».
Desde Bankinter consideran que la operación, en caso de producirse, generaría una serie de cuestiones que tendrían que ser aclaradas, entre ellas, el reparto de paquetes entre ACS y los fondos y la financiación de la misma. Asimismo, advierten de que habrá que analizar el papel que pueda jugar el Gobierno italiano, y si es aceptada por la familia Benetton.
No obstante, ven positivo el hecho de que la nueva compañía se convertiría «en líder mundial en infraestructuras, un sector que presenta un gran atractivo por la recurrencia de sus flujos de caja a largo plazo».
En el año, ACS registra una subida en Bolsa del 3,91%. Por su parte, este jueves los títulos de la italiana también reducen las subidas y tras llegar a dispararse casi un 10%, suma un 6,45% tras revalorizarse un 2,45% en la jornada anterior, cuando el mercado comenzó a barajar la posibilidad de que sea comprada.